Controlar al virus
Si la profesión de vigilante de seguridad ya es de por sí expuesta, en tiempos de pandemia lo es mucho más.
Los profesionales de la seguridad privada, en ocasiones tienen que lidiar con situaciones que para la mayoría de nosotros serían incómodas e incluso angustiosas.
Desde los primeros compases de la pandemia que actualmente sigue asolando al mundo entero, este colectivo no solo ha tenido que hacer frente a las amenazas cotidianas de su trabajo, sino que está teniendo que exponerse en sobremanera al COVID-19 en la mayoría de servicios que se ejecutan: supermercados, comercios, urbanizaciones etc.
Protocolo de seguridad para la seguridad
Qué duda cabe que los vigilantes de seguridad son un colectivo con alto riesgo de contagio, aspecto que el Ministerio de Sanidad no comparte a pesar de las fuertes críticas desde distintas asociaciones. No obstante desde Smart Security hemos desarrollado desde los primeros compases de la pandemia, un protocolo de actuación para cada servicio en el que se hace constar las posibles amenazas de contagió y los modos de proceder. Asimismo se ha facilitado a todos nuestros efectivos los EPI´s necesarios para el desarrollo de los servicios.
